Temerarios en el bosque {Mar y cualquier criatura peligrosa xD}

Llevábamos allí un rato, aún no sabía porqué nos habían mandado allí ni para qué, pero me daba igual. Por suerte, no tenía mucho sueño.
-Yo me llamo Margaret.- bostecé, vale, tenía sueño.- Pues en realidad fue una tontería y casi sin querer, solo tiré a alguien al lago cuando pasé por su lado y yo también me caí. Pero por lo que parecía era slytherin y dijo que lo había tirado a posta porque le quería devolver que me tiró agua sin querer. ¿Sabes lo mejor? Que no tengo ni idea de a quien tiré.

Caímos por culpa de una rama que estaba por allí. Me levanté al instante.
-Ya sé que solo son molestos, pero es que se pasó...-volví a bostezar, vale tenía sueño- Sí, estoy bien, ¿y tú?- dije al ver que quemó la rama.
-Bueno, ¿por qué te castigaron a ti? Pareces muy tranquila e inocente, ¿qué hiciste?- terminé de decir, aparté la mirada de la rama y la miré a ella.

Volví a mirar la rama.
-Pues... sinceramente, parece una rama... pero, es como un palo deforme aún más deforme de lo normal. - volví a bostezar, estaba medio dormida ya.- Buf... la próxima vez tendré más cuidado, voy a acabar durmiéndome
Me paré un momento:
-Me pregunto cómo quieren que nos asustemos si estamos medio dormidas, al menos, yo estoy medio dormida.

Al escuchar aquel ruido dí un respingo. Unos momentos después dijo que fuéramos a ver lo que era lo que había sonado. Bueno, no tendría nada de malo ir a ver qué era ese sonido siempre que no nos fuera a hacer nada.
Cuando salió corriendo yo fui corriendo tras ella, iba a ser mejor estar cansada de haber corrido que estar dormida allí.

Noche de luna llena...si era muy preciosa pero para alguien como yo era la mas triste de todas, la peor sin excusa alguna pues tenia que marcharme a hurtadillas de mi habitacion sin ser vista para correr al bosque e internarme todo lo posible en el para que la luna cuando estuviera alzada y sufriera mi transformacion no dañara a nadie; el crepusculo se me hizo eterno, me habia mantenido escondida en el bosque hasta que la luna al alzarse hizo mella en mi. De forma incontrolada e involuntaria mi cuerpo se fue irguiendo y creciendo, todo mi ser cambio dejando atras a la chica de 15 años para ahroa ser una licantropa incontrolable y salvaje.
Un potente y largo aullido tiño la noche, dando por sentado que aquella noche era peligrosa para cualquier mago o criatura que andara por aquel bosque; la licantropa avanzo entre los arboles con leves gruñidos olfateando todo el bosque en busca de alguna presa indefensa. A su nariz le llego el olor a carne humana, joven y magica, la licantropa se relamio como si fuera el mejor de los manjares y avanzo como una sombra silenciosa por el bosque haciendo huir a cualquier criatura como unicornios, aves o roedores; cuando la licantropa las encontro estaba a varios metros lejos de ellas, estaban atadas por lo que eso reducia sus oportunidades de huir, la bestia se relamio y gruño profundamente, sin pretenderlo piso una rama que se partio y las chicas oyeron el ruido pero su reaccion en vez de huir fue acercarse. La licantropa se movio un poco entre los arboles para no ser descubierta y se escondio con suma facilidad, pero sin dejar de gruñir profundamente.

Off: Bien, que os parece si roleeamos así, Mar, Becca y Luna.

Llegamos al sitio, me agache levantando la mano debido a que estaba atada a Mar. Hice que saliera una llama azulada de mi varita y contemple el suelo.

-Se ha ido... quizás fuese un centauro.-

Comente mientras me levantaba y miraba a Mar, un gruñido me hizo mirar hacia su procedencia. Camine despacio y divise un brillo amarillo.

-¿Dave?... Bec...ca...-

Algo me hacia inclinarme a que era ella y no el, conocía a Dave y sabia que era bueno. Pero, creo que debido a la timidez de Becca, pues supongo que como era muy silenciosa seria por eso.

Lanceé un escudo para protegernos por si tenia hambre y pensaba que erramos comida. No me moví con la esperanza de que no nos atacara.

Se escuchaba algo, el miedo me estaba pudiendo, quería gritar del pánico. Vale, estaba despierta. Luna hizo algo, esperaba que pudiera proteger.
-¿Qu...quienes son Dave y Becca? - no podía hablar más tranquila, lo dije todo lo bajo que pude para que no nos oyeran, pero seguramente ya nos habrían oído y vendrían a por nosotras, la próxima vez tendría más cuidado con la gente, eso lo tenía seguro.

Off: me parece perfecto ^^

La licantropa observaba a las jovenes magas tras los arboles, ante el gruñido una de las chicas se habia acercado hasta cierta distancia para despues decir unas palabras que la bestia ignoro; una de las chicas hizo algo, seguramente algun conjuro pero eso no la pararia en su intento de saciar su sed aquella noche. Podia oler y ver su miedo y nerviosismo, casi palparlo y eso a la licantropa le gustaba pues le hacia sentirse mas fuerte y a los demas unas victimas; la criatura salió dejandose ver ante las magas gruñendo con fuerza y amenaza.
Les sacaba un par de cabezas, se acerco poco a poco a ellas entre curiosidad y diversion hasta que se quedo a medio metro de ellas, estiro el cuello olfateandolas gruño y finalmente les solto un potente rugido; alzo una de sus zarpas delanteras descargando su fuerza sobre sus cabezas, pero su zarpa reboto por culpa del hechizo. La licantropa rugia furiosa al ver que no podia dañarlas y volvio a atarcar.

Off: Advierto, que como ya saben Luna, ni siente ni padece xDD.

Me caí hacia atrás, Mar se callo encima mía, otra vez me había pasado lo mismo con el hechizo. Yo había rebotado a causa del impacto, volvió a atacar, me comenzó a doler la cabeza.

-Mar, te importa, tengo que levantarme o nos comerá.-

La mire, estaba casi segura de que era Becca después de todo, las casualidades existen.

-Petrificus totalus.-

Señale con mi varita al licántropo malo, quería observarla, para ver si era ella o no. Pronuncie el hechizo tranquilamente.

Cuando nos atacó y me caí chillé. Un momento después, me levanté. ¿Cómo podía estar tan tranquila? Era sorprendente, yo no podía casi ni hablar y ella se comportaba como si estuviera en su casa y no pasara nada, no lo llegaba a entender.
Después atacó al animal, yo jamás podría hacer aquello, porque o no iba a saber qué hacer o me asustaría.